La lencería o ropa interior es esa prenda a la que muy probablemente prestas menos atención, quizás por el hecho de que suele ir escondida bajo el resto de tu ropa. A pesar de ser piezas que llevamos todos los días, y que en la actualidad han conquistado puestos de preferencia con su variedad de modelos y estilos, lo cierto es que aún siguen existiendo fallos bastante comunes a la hora de elegir y cuidar tu ropa interior.
ERROR #1. COMPRAR EL BRASIER QUE QUIERES EN LUGAR DE COMPRAR EL QUE NECESITAS.
Es decir, ignorar qué patrón y talla son los adecuados y los que mejor nos sientan en función de nuestro cuerpo. Si tenemos en cuenta que son prendas que utilizamos sí o sí todos los días, debemos esforzarnos para que cumplan dos requisitos: que se nos ajusten perfectamente al contorno del pecho y de la espalda y que, a la vez, nos sintamos favorecidas.
Esta prenda interior tiene la misión de proteger los músculos de la zona del busto, por lo que una talla inadecuada puede afectar nuestra salud
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ERROR #2. TENER MENOS BRASIERES DE LOS QUE REALMENTE DEBERÍAS.
usar el mismo brasier durante demasiado tiempo acaba siempre de la misma forma: las fibras que componen su tejido y el esqueleto de la prenda se deterioran hasta dejar de cumplir su función. Según los expertos, no deberíamos usar el mismo sujetador durante más de dos días seguidos. Por esta razón es conveniente priorizar la renovación de los brasieres y conseguir el número necesario de ellos para cubrir tus necesidades. Lo mismo se aplica para las truzas.
ERROR #3. LAVAR TU ROPA INTERIOR O LENCERIA CON LA TEMPERATURA Y DETERGENTE INCORRECTOS
Lavarla a baja temperatura no siempre acaba con las bacterias, ya que estas pueden sobrevivir a un ciclo de lavado. Por lo cual, recomendamos lavar tu lencería con agua tibia, Asimismo, utilizar un detergente muy perfumado puede causar picazón y ardor en personas con pieles sensibles. En otras palabras, podrían ocasionar problemas dermatológicos.
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ERROR #4. DORMIR CON BRASIER Y TRUZAS AJUSTADAS
Si duermes siempre en ropa interior, puede que no estés dejando transpirar tu piel lo suficiente. Por ello, es recomendable dormir sin brasiere y con una truza no muy ajustada. Las consecuencias van desde irritación de la piel por no transpirar lo suficiente, inflamación, convertirse en caldo de cultivo para bacterias y hongos gracias a la humedad, e incluso puede aumentar el riesgo de erupciones cutáneas
ERROR #5. NO SACARTE LA ROPA INTERIOR DESPUES DE HACER EJERCICIOS
No quitarte la ropa interior sudada después de entrenar o hacer ejercicio es sumamente perjudicial. Puede ocasionar rozaduras e irritaciones. así como la aparición de hongos gracias a la humedad provocada por la poca transpiración.